Me decidí por esta opción en vez de los otros ya que solucionaba más de un problema, por un lado el de aprovechar los envases plásticos de las cosas que usamos todos los días y por otro me evito traer más bolsitas cada vez que voy a hacer compras. También resultó ser una opción económica ya que solo gasté cinta ancha y un poco de pegamento.
El proceso de armado empezó trenzando 3 bolsas de distintos colores para hacer las manijas, después recorte y uní 5 sachets de leche para formar la base y los laterales, y finalmente uní todo con una bolsa de jabón en polvo.
El principal inconveniente que tuve fue el pegamento para unir los sachets ya que al ser de un material tan liso no encontraba un pegamento que los uniera, probé con la gotita y se despegaba como si nada, después con uhu y tampoco, finalmente con lo que más me resultó fue con poxiran pero como seguía siendo una unión débil las reforcé por encima con cinta ancha transparente.
Otro inconveniente fue el agarre de las manijas y cómo reforzarlo, lo que hice fue poner del lado de adentro donde se agarran las manijas el envase del suavizante para ropa que tiene un plástico mucho mas resistente que el sachet y así quedaron reforzadas.
También se me había ocurrido recortar las imagenes de los alimentos congelados y pagárselas por afuera pero finalmente me gusto más como quedaba la bolsa blanco y negro.
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